Seguimos jugando a los contrastes. ¿Hay algo más disparatado que un cocodrilo sin dientes? ¿Cómo se habrá quedado sin esa alargada dentadura? ¿Comerá purés o habrá decidido ir al dentista? Porque como es bien sabido a los cocodrilos les da miedo los "sacamuelas".
Os dejo algunas de las historias y dibujos que han realizado mis niños para que salgáis de dudas y descubráis más sobre este pequeñín reptil.
¡Genial, chicos! Geniales vuestras redacciones. Muy orgullosa de vuestro esfuerzo.