Esta semana hemos vuelto a dar voz a las
cosas que nos rodean y lo hemos
hecho con un protagonista muy especial: ¡nuestro colegio!
Después de
entrevistar al estuche la semana pasada, esta vez les propuse a mis niños y
niñas imaginar que el colegio podía hablar. ¿Qué nos contaría si le diéramos
voz? ¿Qué siente cuando suena el timbre, cuando el pasillo se llena de pasos,
cuando las aulas despiertan con risas y cuadernos abiertos?
Convertidos en periodistas por un día, prepararon sus
preguntas con curiosidad y cariño. El resultado ha sido una colección de entrevistas
llenas de creatividad, humor y ternura. Hay colegios que se confiesan cansados
del ruido, otros que disfrutan viendo crecer a sus alumnos, y algunos que hasta
sueñan con vacaciones bajo el sol.
Hoy comparto aquí algunas de esas entrevistas para que
podáis disfrutar de las voces que han surgido entre pupitres, lápices y muchas
ganas de imaginar.
Porque cuando los niños escriben, el colegio sonríe.























